Tras dejarle la novia, el joven protagonista de esta novela sólo recupera en parte su entusiasmo en cuanto decide escribir una novela. Sus lecturas últimas son poco inspiradoras, pero intuye que será el propio lenguaje lo que le mostrará el camino. En las calurosas tardes de verano, acostumbra a pasear y sentarse junto al río. Inesperadamente un grupo de chicas se reúne en la orilla. ¿No serán ellas la mejor inspiración?