Acusada del asesinato de seiscientas cincuenta jóvenes, Erzsebét Bathory es una de las criminales más siniestras de la historia. En su castillo de los Cárpatos, a finales de siglo XVII, la condesa tortura a sus víctimas con el fin de desangrarlas y conservar su juventud. Su leyenda maldita y fascinante pervive en el tiempo.