Tras unos años con más sombras que luces entre Colombia, México e Irak, Max regresa a Madrid en 2004. En un bar, la ciudad y el recuerdo de Elsa se le caerán encima, al descubrir entre sus botellas la escultura de Bastet que adornaba "El Gato Azul". Una nueva entrega de la serie protagonizada por Max Lomas que nos presenta una historia tan dura y descreída como iluminada por explosiones del humor más inteligente.