Cuán complejo y completo es un personaje histórico y a la vez ficticio que conjunta características de Leonardo da Vinci, Erasmo de Rotterdam, Nicolás Copérnico, Paracelso, Étienne Dolet, Miguel Servet, Andreas Vesalio, Ambroise Paré, Andrea Cesalpin, Girolamo Cardano, Galileo Galilei, Campanella, Giordano Bruno y otros. Y qué amplio el intelecto creativo y qué calidad de investigación los de Marguerite Yourcenar con los que descubrió a esa figura, a Zenón, el héroe de "Opus Nigrum", su más afamada novela. Magia, literatura y alquimia se entrelazan en esta obra singular y enigmática. Más allá incluso del control sobre sus propias imaginaciones e indagaciones, Yourcenar reveló un personaje en el que hay más de lo que ella hubiera sido consciente en primera instancia. Roger Bacon, el enigmático y fascinante filósofo de la Edad Media, puede ser una de esas naturalezas ocultas pero determinantes en el peregrino Zenón, imagen del filósofo, el médico, el alquimista, también del herborista y, ocasionalmente, del astrólogo; imagen, en una palabra ?tan estimada entre los alquimistas?, del buscador. Si la escritora