La obra ensayística de Pilar Pedraza conforma una suerte de historia de la misoginia en la cultura occidental, y se sirve de las figuras de lo fantástico femenino para reflexionar sobre los miedos y deseos que la cultura patriarcal proyecta sobre las mujeres. Tenebrarium no es una mera colección de textos y artículos, sino que propone un recorrido a través de estas proyecciones de lo fantástico, con sus luces y sombras, fragmentado como nuestra propia vivencia posmoderna.
El presente volumen está dividido en cuatro partes. Cadáveres y osamentas expone la fascinación de Pedraza por la muerte y el cuerpo muerto, recalando en los cráneos y osamentas de los mitos y fiestas de la cultura mexicana. Engendros, locos e íncubos nos recuerda que más acá de nuestras más siniestras fantasías «existen monstruos reales de carne y hueso», seres anómalos producto de la genética y las enfermedades que la cultura y la sociedad convierten en arte y espectáculo. Lo femenino siniestro, una reflexión acerca de las viejas, las vampiras o las muñecas de compañía, donde la autora retoma uno de sus temas predilectos, la representación del fantástico femenino en el arte, ampliando lo expuesto en sus ensayos Máquinas de amar (1998) o Espectra (2004). Y Derivas fantásticas, en la que partiendo de los mitos antiguos llegaremos a los nuevos terrores, encarnados en pesadillas de hoy como la cámara vampira o la nueva carne.
«No hay en este recorrido monstruos híbridos de estirpe divina como el Minotauro o la Esfinge, sino humanos anómalos, deformes y atroces como algunos freaks de feria en su deriva desde el mito al espectáculo, ya sea de circo o de cinematógrafo», concluye Pedraza.