"Las horas grises" tiene similitudes con los breviarios o libros de horas. Pero no lo es al uso, no más allá del parecido con estos en el hecho de unir una serie de himnos o cantos a lo que se tiene devoción. Este libro de poemas es un muestrario del autor hacia la naturaleza, los sentimientos de pesadumbre, las elegías en lo cotidiano; un dejarse ir por los pensamientos que acuden en esos momentos del año o del día que acaban teñidos (si no lo traen de por sí) de melancolía. Hay poemas de clima, más depurados; los hay con autores ejerciendo de protagonistas de estampas acordes a la grisura que se alude; hay poemas irónicos y otros de resentimiento o resignación. Los hay también polvorientos y dandis. En suma, un libro que de forma callada busca ser elegante. Un breviario de otoñales.