Desde mediados del siglo XIX el movimiento obrero soñó con el advenimiento de un momento revolucionario con el que alcanzar una sociedad igualitaria y libre. La Tercera Internacional abrió paso, en 1921, a la fundación del Partido Comunista de España, que daría un gran salto adelante durante la República con su integración en el Frente Popular. La derrota republicana asestó un terrible golpe al PCE, que afrontó el exilio sin haber podido establecer una organización clandestina en España. El largo periodo de resistencia y lucha contra el franquismo adquirió impulso en los últimos años de vida del dictador, hasta la ansiada legalización del partido. A propósito del primer centenario del PCE, José Luis Martín Ramos analiza de modo sintético la trayectoria completa del partido y su decisivo papel en nuestra historia más reciente.