Los protagonistas de estas pequeñas acuarelas, estos esmaltes minúsculos, son en su mayoría niños fracturados por sus recuerdos o por las circunstancias más inmediatas de esas vidas que recién estrenan. Dividido en tres partes, la estructura de este libro replica las fases del viaje hacia la sanación y la luz: la fisura, lo irreparable y la posibilidad de que de esa grieta nazca algo nuevo.