El inspector Singh está de vuelta en Singapur, pero le gustaría estar en otra parte. Su mujer no le da respiro en casa, y en la comisaría sus jefes le recuerdan con insistencia que es una deshonra para el cuerpo de policía. Afortunadamente para Singh, los malvados no descansan, y le asignan el crimen de un abogado de un bufete internacional apuñalado en su despacho. Desafortunadamente para Singh, hay muchos sospechosos desde los otros socios del bufete hasta la exmujer y la viuda, y muchos motivos, porque algunos abogados guardan secretos que protegerían hasta la muerte. La investigación de Singh pronto trascenderá el bufete y diseccionará la sociedad de la aparentemente inmaculada y modélica Singapur, sacando a la luz sus oscuras entrañas.