Toda una declaración de intenciones… ¿y de guerra?Alicia y Vera son dos hermanas de poco más de cincuenta que tienen una relación complicada, sobre todo desde que su madre, Magda, cuando ellas eran unas adolescentes, decidió de la noche a la mañana abandonarlas sin dar explicaciones. Treinta años después, las heridas siguen abiertas.
Alicia siempre ha envidiado a Vera: atractiva, con una carrera exitosa como guionista, una larga lista de conquistas, atrevida y viajera. Ella, por el contrario, siempre ha vivido presa de las convenciones, atrapada en un matrimonio mortalmente aburrido, madre de una hija adoptada con la que no acaba de entenderse, atenazada por un omnipresente sentimiento de culpa y acechada por un perpetuo estado de quiebra económica crónica que la lleva a vivir de okupa en el impresionante y semiabandonado caserón familiar en Pozuelo.
Vera, por su parte, está también luchando con sus propios demonios: decide dejar la casa donde ha vivido gran parte de su vida para empezar una nueva, no sabe muy bien dónde, y debe enfrentarse, de golpe, a la posibilidad de una enfermedad grave. Al mismo tiempo, ve cómo su exitosa carrera de guionista va perdiendo fuelle poco a poco.
La muerte de la madre será el uno de los muchos detonantes que, coincidiendo con las respectivas menopausias, pondrá la vida de las hermanas patas arriba. Las dos emprenderán un viaje a Perú, físico e interior, para intentar descubrir el pasado de su madre y que les traerá muchas sorpresas y nuevos conflictos.